La Programación Neurolingüística es la actitud aprendida en cada situación por todos y cada uno de nosotros durante la experiencia de nuestra vida. Desde el momento en el que nacemos, todo lo que nos pasa tiene un resultado, ese resultado deja una huella en nuestra mente creando una forma de pensar específica sobre ello y aprendamos un comportamiento determinado cada vez que volvemos a vivir experiencias iguales o similares.
Cuando somos conscientes de que muchos de esos pensamientos y comportamientos son frenos en el alcance de nuestros objetivos, o en la resolución de problemas, podemos aprender a cambiar esa programación, creando nuevos pensamientos y acciones para esas experiencias, haciendo que los resultados comiencen a ser diferentes. Podemos poner como ejemplo las fobias. Alguien que tiene fobia a las cucarachas siempre reacciona del mismo modo cuando ve una, es consciente de que ese comportamiento es irracional y que la cucaracha no va a hacerle nada, sin embargo no puede evitar repetir el mismo comportamiento una y otra vez cada vez que se encuentra a una. Con la PNL se puede programar el pensamiento hacia la visión de una cucaracha, creando nuevos sentimientos y por lo tanto nuevos comportamientos cuando el cliente se encuentre en el futuro con una.